Fue construido durante la Guerra Fría y, tras años en el olvido, en 2010 fue abierto al público.
Durante la Guerra Fría, muchos países se prepararon con bases secretas y armas avanzadas con el único fin de superar al rival. Aunque algunas de estas ya no existen, en el sureste de China, específicamente en Chongqing, se encuentra la Planta Nuclear Militar 816, la cual es la más grande del mundo.
Este sitio no solo es el vestigio material de una era marcada por la desconfianza y el poder destructivo, sino que se convirtió en uno de los espacios subterráneos más llamativos del mundo.
Visitar esta planta es conocer un poco más acerca de lo que ocurrió durante la Guerra Fría. Esta base militar, hoy en día, se ha convertido en un destino turístico, y muchas personas llegan para admirar su gran estructura.
Su construcción se dio debido a los temores de una posible invasión soviética y a la escalada global de tensiones en los años sesenta. Tras la ruptura sino-soviética en 1966, el Gobierno chino impulsó la construcción de este búnker bajo las órdenes del primer ministro en ese entonces, Zhou Enlai.
El objetivo principal de esta planta era fortalecer la defensa nacional ante cualquier ataque nuclear. Por ello, más de 60.000 ingenieros militares del Ejército Popular de Liberación participaron en la construcción de este búnker subterráneo, que estuvo oculto hasta el año 2002.
Así es la planta nuclear más grande del mundo
La Planta Nuclear Militar 816 cuenta con una superficie de más de 104.000 m² de túneles y es el mayor sistema de túneles excavado por el ser humano. Además, se extiende a lo largo de más de 100 km de túneles y salas excavadas en el subsuelo.
Asimismo, cuenta con 130 galerías que suman más de 20 kilómetros de longitud a lo largo de 18 cuevas artificiales unidas, las cuales tienen más de 13 niveles, y la altura hasta el punto más profundo es de casi 80 metros, similar a un edificio de 25 pisos.
Fuente: eltiempo

