Con el inicio del año 4723, el 2025 le da la bienvenida a la Serpiente de Madera como animal representativo para toda esta nueva etapa. Para los fanáticos astrológicos, descubrí cómo será el año de los doce signos que integran el zodiaco chino.
El Año Nuevo Chino comienza este 29 de enero y marca el inicio del año 4723, en el calendario chino tradicional, que finalizará el 25 de febrero con el Festival de los Faroles, donde se realizarán grandes rituales, tradiciones y acciones de la cultura asiática.
Esta festividad tiene una gran importancia astrológica, donde los signos del zodiaco chino generan una gran expectativa sobre lo que depara para cada persona en el año y su personalidad. Con un 2025 que le da la bienvenida a la Serpiente de Madera como animal representativo, conocé cuál es tu su signo y qué te espera para este año.
Qué significa la Serpiente de Madera
Este año la unión entre la serpiente y la madera, deja una poderosa combinación que invita a la reflexión, la evolución y el cambio, mediante una actitud de apertura y aceptación frente a las diversidades de la vida. Es momento de dejar atrás aquellas cosas que nos pesan y nos duelen, para habitar una nueva piel más poderosa y fuerte.
La Serpiente de Madera nos invita a morir y renacer constantemente, atravesar los ciclos de la vida con convicción y decisión, y abrirse al cambio en todas las áreas que nos atraviesen. Es un momento ideal para trabajar la consciencia y el poder de uno mismo.
Qué le espera a cada signo del zodiaco chino en este 2025
- Rata (1948, 1960, 1972, 1984, 1996, 2008, 2020): será un comienzo intenso, transformador y activo en el plano profesional, laboral y social. El mayor desafío será trabajar en los pensamientos negativos que busquen tirarte para atrás y no conseguir tus metas. La Serpiente de Madera será la clave para que puedas conseguir fuerzas y enfocarte con firmeza en tus objetivos. La Rata tiene que soltar y cerrar ciclos de temas pendientes, dejar los grises y tomar las decisiones que sean necesarias.
- Búfalo (1937, 1949, 1961, 1973, 1985, 1997, 2009, 2021): es un año próspero, abundante y exitoso para este signo. Con sus cualidades de practicidad, resolución y análisis, que se juntan y potencian junto a la Serpiente, las distintas áreas de sus vidas se verán repletas de logros y prosperidad. Uno de los desafíos será buscar el balance y equilibro en la dedicación y energía que le otorgan al estudio, al trabajo, a lo personal y a las sociales. Vienen tiempos de expansión y nuevas aventuras que te sorprenderán en el camino, algo que será esencial en lo que respecta al amor.
- Tigre (1938, 1950, 1962, 1974, 1986, 1998, 2010, 2022): la libertad y autoridad, son dos cosas que caracterizan a este signo. Será un año de pura enseñanza y aprendizaje, ya que deberán someterse y transitar situaciones que se escapen de su control y eso pondrá en juego su templanza y calma para resolver. En lo que respecta a asuntos familiares y de vivienda serán tiempos de transformación y cambios, donde la buena comunicación funcionará como el pilar fundamental para vínculos prósperos y saludables.
- Gato (1939, 1951, 1963, 1975, 1987, 1999, 2023): su tendencia se inclina siempre por la comodidad, el bienestar y una presencia sigilosa y cautelosa. Frente a un año de grandes desafíos en el plano económico y de finanzas, la Serpiente le aportará a este signo la templanza, seguridad, confianza y tranquilidad para poder afrontar todos los problemas que se presenten y tomar las mejores decisiones posibles. En lo que respecta al amor, el Gato tendrá un año donde predominará la intuición y el seguimiento de los sentimientos, con poco análisis y más entrega a romper lo establecido.
- Dragón (1940, 1952, 1964, 1976, 1988, 2000, 2012, 2024): este signo comenzó su ciclo de 12 años durante el 2024, al haber sigo el animal representativo. Por eso, este 2025 será la clave para que cierren y continúen aquellos proyectos y objetivos que iniciaron meses atrás. La fuerza de la Serpiente los desafiará a concentrarse en la responsabilidad, el esfuerzo y la organización de una rutina para equilibrar el tiempo, la energía y el dinero, algo que será de mucha interés. Este año los invitará a que conecten más con su interior, su espíritu y lo que les indica la intuición, para dejar de lado el razonamiento y la predominancia del intelecto. En lo que respecta al amor, las personas solteras encontrarán la intensidad en un romance que se destace por la comunicación y confianza.
- Serpiente (1941, 1953, 1965, 1977, 1989, 2001, 2013, 2025): el signo que rige el año tendrá tiempos exitosos, abundantes y prósperos, donde la transformación será la clave fundamental. Deberán dejar lo que no les hace bien, abandonar y quitarse esa piel de malas energías, para darle la bienvenida a la transformación, el cambio y su nuevo yo. La Serpiente les brindará la fuerza y el poder que necesitan para lograr sus metas y atravesar momento de duda y confusión. La necesidad de cambio será la frase que los acompañará durante todo el camino.
- Caballo (1942, 1954, 1966, 1978, 1990, 2002, 2014, 2026): este signo vivirá el crecimiento en el plano económico, profesional, laboral y persona, donde los vínculos y la relación con el entorno será próspera. Sin embargo, la Serpiente los obligará a reducir la intensidad y ritmo acelerado que llevan para evitar forzar y controlar todas las cosas. Además, habrá varios momentos donde la introspección será necesaria para evaluar los sentimientos, sanar viejas heridas y entregarse a la diversión de la vida.
- Cabra (1943, 1955, 1967, 1979, 1991, 2003, 2015, 2027): la sanación y renacimiento son las dos palabras claves que acompañarán a este signo. Producto de su naturaleza solitaria, insegura, sensible y frágil, la Serpiente llegará como ese complemento que necesitan para sentirse acompañados, seguros y fuertes para afrontar las situaciones que se les presenten. Será un año de alineamiento y resonancia con los deseos, aspiraciones y objetivos, donde transmutarán hacia una nueva piel y así dejar de lado todas las dudas y la falta de confianza personal.
- Mono (1944, 1956, 1968, 1980, 1992, 2004, 2016, 2028): tras un año de aventuras, cambios y alteraciones, la Serpiente obligará a este signo a bajar un cambio y afirmar sus bases de forma sólida y firme. En cuanto a lo laboral y los vínculos, las cosas irán bien mientras puedan dejar su egocentrismo y competencia de lado, preserven el silencio y se entreguen a transitar las cosas con calma, empatía y relajación.
- Gallo (1945, 1957, 1969, 1981, 1993, 2005, 2017, 2029): la creatividad y el lado artístico saldrán a la luz este año, donde la búsqueda por nuevas actividades y rutinas que los conecten con su lado expansivo, serán los centros principales de atención. La Serpiente aportará esa templanza y fuerza interior para adoptar nuevas percepciones sobre la vida y disfrutar de la prosperidad en los ámbitos profesionales, académicos, turísticos y personales. La conexión con lo artístico hará que las personas de Gallo se sientan más libres, plenas, contentas y entusiasmadas con continuar su camino y objetivos.
- Perro (1946, 1958, 1970, 1982, 1994, 2006, 2018, 2030): este signo se destaca por su intuición, la empatía, la observación y la atención tanto interna como externa. La Serpiente vendrá a potenciar sus ya natos sentidos y les brindará una poderosa capacidad de ser más estratégicos y firmes a la hora de tomar decisiones. Será el signo que más sienta la renovación y transformación que invita la Serpiente, donde durante el trayecto del año irán atravesando por distintas circunstancias que dejen al descubierto su serenidad y conexión con lo espiritual, el intelecto y lo creativo.
- Chancho (1947, 1971, 1983, 1995, 2007, 2019, 2031): la Serpiente es el signo complementario y opuesto del Chancho, por lo que en todas las oportunidades nuevas que se le presenten, deberán destacar el razonamiento y el compromiso con su presente. Sus vínculos y entornos serán claves para aprender y poner en evidencia sus verdaderos deseos, con la fuerza necesaria para poner los límites y determinaciones cuando sea necesario. Tendrán que solucionar y cerrar temas pendientes que tengan resueltos, para así transitar el cambio hacia una vida más social, activa y plena.
Fuente: ambito